sábado, 31 de enero de 2009

La única forma de llegar a Formentera



Una de las razones por las que me encanta esta isla: se llega en barco.

Dejar atrás el continente, entrar en un pasillo iniciático, escuchar Mediterráneo mientras ese barco borda con hilos blancos esa alfombra azul de Aladino que te transporta.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Julio Medem escribe estas líneas en el libro "Contra la certeza": "Al día siguiente de rodar el último plano de los amantes del Círculo polar, me fui de viaje con una pequeña cámara de video digital, de estas que caben en la palma de la mano...(rumbo a la isla). Lo primero que grabé con la cámara fue mi propia sombra reflejada sobre la estela del barco que me llevaba a una pequeña isla del Mediterráneo. Tuve la sensación de estar dejándome atrás, poniendo ese mar de por medio entre lo que había sido y hecho hasta entonces, donde había dejado mis cosas, y algo nuevo que no conocía".

Berta

Anónimo dijo...

Yo voy bastante a Ibiza, casi todos los años, pero nunca he dado el salto a Formentera. Será que me da miedo ese viaje iniciático, o quizás que estoy demasiado cansado después de las noches de no dormir, veremos si me convences.

Espardell

fernusan@hotmail.com dijo...

Berta, es que,en realidad, Formentera no es una isla, es una balsa que flota en medio del mar. Dicen que en ocasiones la gente se marea con el viento en calma, y nadie sabe por qué...

Espardell, algún día de resaca descubrirás las palabras de Medem, y entonces disfrutarás de ambas.

Por cierto, Julio Medem es muy conocido en España, pero un poco menos en otros países. Si podéis, haceros con películas como Lucía y el sexo o Los Amantes del Círculo Polar. Espero que disfrutéis como disfruto yo viéndolas.