
Todos estamos dispuestos a hacer algunas locuras por algo que al resto de la humanidad le parecería absurdo.
En mi caso, el arte es una de esas razones. Si te dicen que tienes que subir esta pared para ver unos frescos de mil años de antigüedad sorprendentemente conservados en la roca, dirás: "Que suba Rita". Pero si el arte es una de tus pasiones, dirás: "¿En qué punto exactamente nos vamos a dar la hostia disfrutando de esos frescos?". Pues exactamente donde está la flecha naranja.


Esta fotografía está tomada desde la parte más alta de la roca. Si pincháis en la imagen, podéis comprobar que los puntos del centro de la fotografía no son hormigas, sino personas que se debaten entre las dos frases con las que comienza este post.